La madrugada de este viernes los jueces Ysis Muñiz, Luis Jiménez y Rosalba Garib, de la Segunda Segunda Sala Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, ratificaron la medida de coerción consistente en prisión preventiva en contra de los exministros Donald Guerrero y José Ramón Peralta, imputados en el supuesto entramado de corrupción desglosado en la operación Calamar.
En nombre del equipo de juristas que representan a Peralta, la abogada Emery Colomby Rodríguez consideró que la decisión no tiene razones jurídicas que la avalen.
“Respetamos esta decisión, pero no podemos compartirla de ninguna manera, porque desde el punto de vista del derecho vigente, no hay razones jurídicas que la justifiquen”, explicó Rodríguez en un comunicado que recibió este diario.
Según el testimonio de la representante legal, no existía “una sola prueba” que inculpara a quien fungió como ministro Administrativo de la Presidencia en el gobierno de Danilo Medina, y agregó que lo correcto hubiese sido aplicar “libertad pura y simple”.
“Sin pruebas, no debería haber acusación. Tan sencillo como eso”, añadió la abogada.
Terminó sus palabras escribiendo que Peralta se siente muy agradecido de todas las muestras de solidaridad que ha recibido y que confía en que la justicia prevalezca y sea capaz de actuar de acuerdo a las leyes dominicanas, sin influencias mediáticas ni políticas.