El Acuerdo de Libre Comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana (DR-CAFTA) establece que, en caso de incumplimiento, se pueden imponer sanciones o obtener compensación. Por ejemplo, si el gobierno dominicano toma medidas para proteger a los productores nacionales de arroz, podría estar violando el DR-CAFTA y recibir sanciones.
El DR-CAFTA establece que las partes no pueden:
Adoptar o mantener medidas que sean incompatibles con el Acuerdo sobre Licencias de Importación
Aplicar un procedimiento de licencias de importación a una mercancía de otra parte sin notificarlo
El DR-CAFTA también establece que los Estados pierden en parte el derecho de establecer normas que restrinjan el paso de mercancías por sus fronteras. Esto significa que no pueden establecer impuestos o reglas que den ventajas competitivas o réditos fiscales a los productores nacionales.